El liderazgo político de Max en Yauyos

Muchos de los detractores de la figura de Max, que se ungen como líderes de la provincia o de Vitis, terminan por convertirse en personajes de un perfil cuestionado, competidores de la vieja guardia, con vicios del pasado y lleno de ignorancia y de odio, que introducen verdades a medias en un contexto confuso para la mayoría de los yauyinos.

Sin embargo, Max el líder interactúa con los pueblos, brindándole seguridad y esperanza, pero a cambio exige su respaldo masivo y comprometido, él es  icono de osadía, inteligencia, posibilidad de cambio y seguridad de una protección paternal. Quizá por eso la teoría política es clara cuando señala que los líderes como él son los que reciben de las sociedades, el encargo de marcar el rumbo de los pueblos.

Max es conocedor de la idiosincrasia yauyina, por eso de cada cuatro, tres le siguen fielmente y el cuarto lo admira.Es un actor decisivo y no funcionario de segundo orden al interior de  la provincia.

Max es un líder de mensaje claro y directo, se presenta como un hombre común, promedio, posición que marca una clara distancia con la postura de semidioses que adoptaron los antiguos caudillos y los reciclados.

Max es un nuevo líder que propone como alternativa a su persona, su discurso está centrado en actitudes políticas coincidentes con la opinión pública, realiza comentarios sobre la necesidad de justicia social  en todos los pueblos de Yauyos, a la vez que asegura que posee capacidades de administrador.

Max  es consciente de que Yauyos yVitis en particular tiene muchas posibilidades de desarrollo, las valora y las difunde en todos los eventos, así da a conocer que su puebloVitis es un pueblo pujante.Con Max está garantizada la seguridad y la experiencia de una buena gestión  de la provincia que les puede brindar un líder nato  del sólido norte.

Max  respeta las tradiciones  de su pueblo y las opiniones de todos los ciudadanos y de las generaciones, por ello cuestiona  a los seudo líderes y detractores que han aparecido de forma improvisada y fugaz, cargados de promesas típicas ofrecidas en las campañas populistas, en la mayoría de casos, al llegar al poder, olvidan las promesas que los catapultaron para el cargo que ejercen.

El lápiz de Tragadero